El retratista de momentos

 

Mulas ante Canogar, Chillida y Saura, Café Florian Venezia
Mulas ante Canogar, Chillida y Saura, Café Florian Venezia

A Ugo Mulas se le encuadra en el neorrealismo italiano porque fotografiaba a personas en su medio natural. Sin embargo también podría recalificársele entre los menos realistas de los fotógrafos con sopor cinematográfico que la -a veces artificiosa y demasiado potente- categoría del neorrealismo rosselliniano o viscontiano trataba de engullir debido a nuestra pereza intelectual para apreciar las diferencias. Ugo Mulas tiene todas las rarezas de un cazador psicológico, empeñado más en captar la idiosincrasia del personaje en su escenario que la realidad neodesnuda. Los retratos de Mulas miran hacia adentro del personaje al mismo tiempo que pestañean hacia afuera aprehendiendo su envoltorio. El resultado es un retrato psicológico, pero no de un personaje, sino de un momento. Tal es la distinción entre Ugo Mulas y los neorrealistas… Mulas componía retratos donde la persona era un ingrediente del momento. El fotógrafo sin H dedicó buena parte de su obra a retratar a otros artistas [Warhol, Lichtenstein, Duchamp], como el Giacometti que reproducimos en una respiración tetradimensional, adquirida por el pestañeo de Mulas en la Biennale de Venezia en 1962.

Las fotografías de Mulas se exponen, con el patrocinio del BBVA, en el edificio del banco en Castellana 81 en Madrid.