2#NotasAlMargen: Patria

2#NotasAlMargen: «Patria»

Unknown-1

Es probable que casi todo haya sido comentado ya, analizado, respecto de la novela «Patria», escrita por Fernando Aramburu y publicada por Tusquets en 2016. Además de un éxito en ventas y crítica, ha sido distinguida con al menos cuatro premios literarios en menos de dos años, el Premio Nacional de Narrativa y el Premio de la Crítica, ambos en España, entre ellos.

De manera que, con lo que ya se ha expresado sobre ella, callarnos tras haberla leído sería una buena opción… aunque hurtaríamos una oportunidad, aunque sea modesta como la nuestra, de compartir literatura, hacer circular los libros, socializarlos.

Algún lector que no conozca nada del libro podría pensar inicialmente que se trata de una historia de eso que se ha denominado el «conflicto vasco», es decir, del terrorismo de ETA. Incluso puede haber personas que, sin abrirlo ni haber consumido reseña, crítica o información sobre la obra presupongan que se trata de un ensayo. En cambio es una novela, lo cual numeroso público tiene asociado con la ficción. El relato de ‘Patria’ es, no obstante, tan real como pudiera serlo la realidad.

Como le suele ocurrir a la novela escrita en varios planos narrativos andamiados en una sólida arquitectura de personajes y escenarios, ‘Patria’ es muchos libros al mismo tiempo:

  • es una descripción minuciosa del microcosmos social en el País Vasco rural pero periférico a las ciudades;
  • un retrato psicológico de cómo permean acríticamente los relatos míticos en las personas a través de canales emocionales, dando un vuelco de 180 grados en un momento a la coordenada por la que durante toda una vida se ha podido regir un individuo, y hacerlo… dar ese vuelco… sin que medie ninguna reflexión, ningún gran pensamiento ni balance vital… simplemente por circunstancias del micromundo personal alineadas con otros micromundos personales que conforman un entorno grupal que actúa como una galaxia oligofrénica, moviéndose al unísono mediante fuerzas desconocidas;
  • casi un acta notarial que da cuenta de manera sencilla de los mecanismos interpersonales, banales, nada profundos, casi automáticos, desprovistos de cualquier recurso intelectual, abrazados a una irracionalidad rayando en la estupidez mineral, que han ido reclutando integrantes para el terrorismo de ETA al mismo tiempo que adeptos a una dinámica hostil a una España desconocida pero en cualquier caso enemiga, a la que había que combatir porque los patriotas vascos habían determinado que era el enemigo explotador;
  • un manual de cómo sobreviene la victimización, de un día para otro, con la normalidad de la lluvia que cae, igualmente que le ocurre al victimario sin entrar en grandes palabras o en mínima introspección… llegas a ser víctima cuando te matan, cuando te matan a alguien, y en ese momento ya pasas a un lado del campo, sin que ni siquiera seas consciente de haber elegido equipo.

Es probable que no se escriba ningún ensayo, ninguna obra académica de historia o de ciencia política, que logre proporcionar una explicación tan radical sobre el conflicto vasco en torno al terrorismo de ETA, ni que se acerque mínimamente a la sencillez de abordar esa explicación sin un índice o estructura predeterminada de contenidos, sin una taxonomía de conceptos… nada más que dejando que la realidad cuente su propio relato a un novelista que ha sabido escucharlo quitándose él mismo de la ecuación narrativa.

Además, como ocurre con los relatos de ese nivel de inspiración, las más de 600 páginas se leen con agilidad gracias al recurso del autor de escribir capítulos cortos, como planos cinematográficos, que van contando escenas intercaladas: ora aquí, ora allí.

No es descabellado pensar que cuando transcurran suficientes décadas para que haya reposado lo suficiente, ‘Patria’ sea calificada de obra maestra de la literatura en español. Sin que haya que tomar la comparación al pie de la letra -puesto que es simbólica- nos atrevemos a sugerir que ‘Patria’ comparte la virtud que tiene ‘El Quijote’ de describir con soltura y elegante naturalidad los átomos de aquello que compone la materia humana, de forma que sin pretenderlo ofrecernos una explicación sobre fenómenos sociales aparentemente complejos, al final esa explicación decanta por sí misma con asombrosa fluidez, como si nos iluminara de repente.